FUNDAMENTOS


16/2/15

16/2 D. CARLOS ROQUE SÁNCHEZ

Hoy en el Círculo Mercantil hemos asistido a un nuevo acto en el que de nuevo nos encontramos con un científico colaborador incondicional del Curso, don Carlos Roque Sánchez, para hablarnos sobre los Relojes de Sol en nuestra Ciudad. Como buen investigador y científico una de sus cualidades es la de ser observador, no olvidemos que muchos de los descubrimientos se deben a la casualidad, sin embargo hay que tener una mente abierta para saber ver lo que no esperamos ver. En el caso que nos atañe, el reloj de sol, es posible que también surgiera debido a la casualidad, una vez que el hombre deja de ser nómada y se asienta haciéndose sedentario, siendo el momento en el que surge la agricultura, un palo clavado en el suelo sin mas intención, hizo que la observación continua llevara a deducir que la sombra proyectada se movía uniformemente y coincidía con el mismo periodo de tiempo del día anterior. Es uno de los métodos de medición del tiempo más antiguos, su construcción sencilla hizo más fácil su propagación. En Sevilla podemos ver una buena colección de estos relojes, podemos verlos horizontales o verticales, el primero está construido sobre un plano horizontal llamado limbo en el que están grabados una serie de trazos numerados y en el que se proyecta la sombra del gnomon, normalmente se montan en espacios abiertos, como en el caso sevillano, en el Parque de María Luisa o delante del Palacio de Congresos. Se suelen instalar con una cierta inclinación, apenas perceptible, para estar perpendicular al ecuador. El reloj vertical se le conoce así por la posición de su limbo, se suelen ver en las fachadas y lo normal es que estén orientados al sur, no es posible ver la hora si se encuentra mirando al norte, cómo es el caso de uno de los que existe en la Giralda, que mirando al norte jamás podrá proyectar su sombra porque nunca le da el sol. La ciencia que estudia y teoriza los conocimientos de los relojes de sol es la gnomótica. Pero en el siglo XVI, Juan de Arfe el orfebre que nos dejó su conocida Custodia de la Catedral, dejó todo un Tratado escrito sobre el arte de construir “reloxes” de sol, describiendo el trazado de las líneas horarias. En Sevilla como hemos visto anteriormente tenemos una buena colección de estos relojes, cómo en el remate de la fachada de la Casa de Guardiola, representa un ángel con dos velas y una paleta, con pinceles. Las líneas horarias no están dibujadas y la numeración va en números romanos desde las 5 de la mañana hasta las 13 horas. En la Iglesia de la Caridad existe otro pero parece que es de poco fiar la hora que presenta. En la Catedral tenemos un par de ejemplos, siendo uno de ellos bien visible, en la Giralda además del anteriormente descrito hay otro, pero éste si está bien instalado, en la cara sur, por tanto solo le faltará el sol en caso de estar nublado. Hay otro en la cara interior de la Puerta del Perdón, en la Capillita de San José existe uno de los mas conocido, tiene trazos que marcan las horas y las medias y cuenta con numeración romana. En la Iglesia de la Magdalena y en su fachada lateral o la de los pies, existen dos relojes pintados en azul con numeración arábiga y marcan desde las diez hasta las siete. En el Museo de BBAA y el patio de los bojes se puede ver otro, o en San Lorenzo u Omnium Sanctorum, en cuanto a los relojes horizontales podemos verlo en la Glorieta del Reloj de la Plaza de América o frente al Palacio de Congresos como ya se ha dicho anteriormente. Hasta aquí la magnifica conferencia del señor Roque, como en ocasiones anteriores ésta también ha gustado mucho, por la cercanía y sencillez que muestra al comentarnos determinados principios científicos, se le nota su trayectoria docente y evita mostrar abiertamente su erudición para hacer facilmente entendible sus pinceladas sobre la física. Enhorabuena nuevamente.